El Padre Jacob Murad un sacerdote en Al-Qaryatayn, Siria, que fue secuestrado por las fuerzas del Estado Islámico en mayo, ha hablado de sus tres meses de cautiverio.
El sacerdote dijo quenunca fue torturado, pero que él y los demás cristianos cautivos fueron amenazados de muerte si no se convertían al Islam.
"Pero no se convirtieron al Islam a pesar de toda la presión que recibieron", le dijo a una emisora cristiana árabe. "Fueron fieles a la recitación del Rosario".
"Esta experiencia de prueba fortaleció la fe de todos, incluyendo la mía como sacerdote", añadió. "Es como si hubiera nacido de nuevo."
"Tendemos a pensar en ellos como beduinos incultos", dijo en una entrevista con la BBC. "Es todo lo contrario. Son inteligentes, educados, con títulos universitarios, y meticulosos en su planificación ".
Fuente: http://www.byzcath.org/
No hay comentarios:
Publicar un comentario